8.5.06

UNA BELLA ESTATUA

- Es como tocar una bella estatua, Dijo mientras en la oscuridad sus dedos repasaban la profunda oquedad que se forma entre la última costilla y el hueso de la cadera.

Quizás, si dejo de comer mi cuerpo adquirirá la cualidad ósea del mármol y, por fin, seré digna de él.

3 comentarios:

Anónimo dijo...

Hambre.Eso es lo que tengo.Hambre y no se puede definir de otra manera.Comenzó el regimen, reconducir mi cuerpo al volumen que me gusta y para eso, conozco el camino, es el mismo de todos los años:hambre.
Lechuga, coca cola light y café, es todo lo que me permito y en cantidades ínfimas.
Ayer me quedé en el curro hasta las 22 ( se acabaron los tiempos felices) y al salir, me mantuve firme, no mastiqué compulsivamente mientras odiaba a mi jefe, sólo lechuga.Pasada esa prueba, me siento fuerte.
Claro que aún no tengo el refrendo de que me consideren una estatua, me dicen eso, y no como en 3 años además de casarme con el interlocutor!

marga dijo...

Esas oquedades malditas... dan para muchas letras. Precioso.

PRIMAVERITIS dijo...

exiliado, yo también tengo hambre....hasta las nueve que ataco la caja de galletas, y encima me llaman anoréxica.
perlimpina, oquedades malditas, si, me gusta la frase.