LA FAMILIA Y SUS CONSECUENCIAS

Hace un año mi padre me invitó a comer a su casa a una reunión familiar.

En la comida su mujer dijo que quería estudiar algo este año, por casualidad yo había leído que quedaban plazas en la Escuela oficial de idiomas y le dije que se apuntara, como a ella le daba corte ir sola (primer aviso del desastre) a mi me salió la vena julai estupenda-hijastra-buenrollito y le dije que la acompañaría.

El día de la matrícula ella se rajó alegando que vive muy lejos de la escuela (segundo aviso del desastre) pero yo ya estaba en la cola así que ahí me quedé, ¿se puede ser más panoli? si, se puede.

Quedaban plazas en Alemán, Francés y Catalán

Francés ya se, estuve viviendo un año en Gabachilandia.
si me matriculaba en catalán que era lo práctico, mi marido me iba a matar, es profuntamente anticatalanista,
Quedaba Alemán, así, en frío, como tirarse a una piscina vacía desde la tercera planta del trampolín, con los nervios hasta me equivoqué de horario al traducir las seis de la tarde por las 16h (tercer y definitivo aviso, ahí debí enterarme de que lo mío con la EOI iba a ser un desastre y darme por vencida)

Así que por culpa de los frustrados intentos de barniz cultural de la mujer de mi padre y del anticatalanismo del padre de mi hijo llevo toda la semana encerrada luchando con las declinaciones del posesivo alemán y las diferencias aleatorias de género en sus sustantivos y sin tiempo para prepararme las asignaturas de filología hispánica que era lo que yo quería hacer.

¿por que me meto en estos líos?