20.1.08

ULISES


A falta de marineros que me aten al palo mayor, consecuencia lógica de pilotar esta nave en la más absoluta soledad, deberé resistir la tentación de las sirenas por el método mucho mas expeditivo de emigrar todo el día a casa-mamá donde no hay internet por el que navegar hacia sus encantadores y peligrosísimos cantos.

Es lo malo de regresar a casa tras cruentas guerras contra uno mismo, que aún se puede perder alguna batalla.

1 comentario:

Blackberry dijo...

Ah, pues estamos igual pero al revés, que yo tengo el ordenador de casa destripado desde hace tres semanas... y me vengo a casa de mi madre para conectarme a internete!!

(Así, ¿"Él" ha dado señales de vida o qué?)