30.7.14

ME MUERO DE HAMBRE

Me muero de hambre, pienso en la tortilla de patata que hay en la nevera y se que no debo, y que acabaré conformándome con un café, el segundo de esta mañana.
Cuando se ha ido el pelirrojo a currar me he vuelto a meter en la cama, estoy muerta de sueño, pero nada, no hay quién duerma, he empezado a darle vueltas al escritorio que necesito para el salón y me he desvelado, me masturbo a ver si así me duermo pero aparte de un buen orgasmo no consigo nada más, ala, arriba, que le vamos a hacer, a mirar páginas web de muebles
Tiene que ser grande, para poder dibujar a gusto, pero no demasiado, que tengo que meter dos, uno para el gajito y otro para mí, no se si blanca, como las paredes o abedul, como la estantería, o de cristal. Las de cristal molan, pero son frías, y necesito cajonera para la impresora, el escanner, la cpu, el portátil del gajito, la de trastos que se acumulan.
Hoy termino de pintar las paredes, palabra de scout, estoy harta ya de los rodillos y de tener el salón como un campo de guerra, aunque da gusto verlo todo tan blanco después de años con las paredes a colorines, creo que voy a tirar la tele de tubo, es un trasto y no la uso nunca, una pantalla grande para el ordenador cuando vuelva a tener pasta y ya está.
La visita de ayer a Ikea fué un fiasco, a lo que ya tenía elegida la mesa resulta que no les quedaban existencias, y el pobre pelirrojo aguantando los kilómetros de muebles cargadito con la bolsa, hubiera ido sola pero necesito su super coche para traer los paquetes, en el mio no caben, medio en broma me dijo que el precio del porte era una buena mamada, y vaya si cumplí, je, je, eso si, primero tuve mi parte que ya sabe que si no, no le dejo terminar, no me gusta quedarme a medias. No me extraña que tenga sueño, no hay forma de sacar ocho horas seguidas, y pretende salir esta tarde en bici, me parece que se va a ir solito, bueno, con la pandilla, que alguien se animará, seguro.
Tengo que volver a salir de compras, necesito un bikini, que tengo por delante quince días de playa y llevo todavía los de hace tres años, en cualquier momento voy a salir del mar en bolas de lo pasados que están, y a recoger las fotos de Nueva York, qué viaje más chulo, que cansado pero que chulo, no voy a imprimir las del Metropolitan ni las del Moma, que me cuesta más que comprarme un libro de arte, la de fotos que tiré, cuando me encontré de narices con el cielo estrellado de Van Gogh me entró una llorera que no se me pasó en dos salas, los negratas de dos metros que vigilaban me miraban con cara de chufla, pero las demás quiero tocarlas. Además, como indulté al pelirrojo de los museos, en esas no tenemos ninguna juntos. A ver si me enseña las que hizo mientras yo devoraba arte, aunque serán pocas que desde que le ha dado por la fotografía tarda más en preparar la foto que yo en dibujar lo que hay delante, hasta su bolsa ha acabado siendo más grande que la mía, el trípode pesa mucho más que los pinceles.
Me muero de ganas de achuchar al gajito, en una semana estaré harta de nene y madrehermana y echando de menos al pelirrojo y su accesorio, pero ahora mismo mi corazón rebosa de amor familiar.
Decidido, el café va con pincho de tortilla, me muero de hambre.

4 comentarios:

Xana dijo...

feliz verano

Morena dijo...

Come! que eso es la felicidad!! los pequeños momentos!

Anónimo dijo...

Hola primaveritis sabes algo de misspink.

Cristian dijo...

Es bello la forma en que escribes y sobre todo me gusta la parte de buscar las fotos de Nueva York, ya que es una ciudad que me gusta mucho y me encantaría regresar. Ojala que pueda conseguir viajes a nueva york a un buen precio para volver allí